jueves, 11 de septiembre de 2008

La ciudad se convirtió en piscina


La despresión tropical Lowell ha traído, hasta el momento un chubasco de tres días. De tal forma que las calles se han convertido en canales y la ciudad se ha paralizado.
Los compañeros de la radio, incansables, describen el caos que sufren aquellos que viven en las laderas de los canales.
En las rancherías los ganaderos abrieron las puertas de sus corrales y los animales, desconcertados, pululan por las carreteras.
Algunas escuelas han servido de refugio para los evacuados. Y sólo los muy avezados se atreven a circular por la ciudad.
Las autoridades, como es usual, se han visto incapaces de responder ante los desastres naturales.
Y una se pregunta si la capa de ozono no tendrá algo que ver...